Radiadores bajo consumo para una factura sin sustos
Índice de contenidos
- Radiadores de bajo Consumo
- ¿En qué consiste los radiadores bajo consumo?
- ¿Cómo instalar radiadores bajo consumo?
Radiadores de bajo Consumo
Cuando llega el invierno –y con él las primeras facturas de la luz o el gas–todos nos acordamos de los radiadores de bajo consumo y decidimos ponernos manos a la obra para dar con la solución perfecta para calentar nuestro hogar sin padecer por la factura. Por lo tanto, vamos a hablar de las características de estos radiadores y sus posibles ventajas con respecto a otros. Además, su instalación es sumamente sencilla y únicamente necesitaremos un taladro, unos tacos y unas piezas de tornillería. Por lo tanto, en muy poco tiempo podemos tener nuestra instalación lista y presta a darnos calor.
En este sentido, seguro que te interesa conocer un poco más los radiadores de bajo consumo a fin de escoger la mejor opción para tu casa.
¿En qué consiste los radiadores bajo consumo?
Este término se refiere a radiadores eléctricos que emplean una mayor inercia térmica del fluido interior y, de esta manera, mantiene durante un largo tiempo su calor redundando en un ahorro de energía.
No obstante, si realmente queremos que funcione como la seda hemos de valorar las dimensiones de la estancia y escoger unos radiadores bajo consumo con una potencia y capacidad de calentamiento adecuadas a ésta. De lo contrario, pecaremos de cortos o estaremos calentando en exceso la habitación y, por lo tanto, derrochando energía (que es justo lo contrario a lo que pretendemos).
Algunos modelos de radiadores disponen de mando a distancia para mayor comodidad, además de tener integrada la pantallas en la que podrás leer tus selecciones y mantenerte informado de la temperatura en la que se encuentra la habitación. Por supuesto, puedes optar por modelos portátiles o dejarlos instalados en un sitio fijo.
No olvides que la seguridad es esencial. Por lo tanto, escoge un modelo que disponga un sistema de seguridad que cortará de inmediato la alimentaciñon eléctrica en el caso de que alcance una temperatura más elevada de la recomendable.
También se ofrecen radiadores programables que nos permitirán regular el encendido y el apagado.
¿Cómo instalar radiadores bajo consumo?
Si ya te has decidido por los radiadores bajo consumo, más vale que sigas a pie juntillas estos consejos para no meter la pata:
- Sitúalos cerca de las tomas de la luz. De esta manera, ahorrarás metros de cable y le librarás de su presencia antiestética.
- No instales los radiadores en las proximidades de una ventana o puertas pues el radiador trabaja en función de la temperatura que detecta en el ambiente y esas posibles corrientes pueden afectar a su funcionamiento.
- Respecto a su mantenimiento, solo es preciso que lo limpies con un trapo suave y humedecido con agua para quitar el polvo. No olvides las rejillas del aire del aparato que podrás limpiar con una pequeña brocha.
Y si no quieres arruinar la decoración de tu casa con un radiador poco estético, consulta los diseños y colores que te ofrece el mercado. Por cierto, el rango de precios es muy extenso y podemos encontrar modelos a unos módicos 60 euros y otros por 400 euros. En definitiva, disfruta del calor y de unas facturas que ya no asustan, ¿verdad?