Generalmente, cuando utilizamos papel pintado lo hacemos para decorar las paredes de las distintas habitaciones de la casa, especialmente dormitorios y salones. Este tipo de decoración ya vivió su época dorada en la década de los 60 y ahora vuelve con más fuerza. Y no sólo para este tipo de estancias, sino también para baños y cocinas. La cuestión es que, al haber tanta variedad de diseños y tipos de papel pintado en el mercado, muchas veces puede resultar complicado decidirse, ya que cada uno cuenta con unas características concretas. Por esta razón, antes de ponernos a decorar con papel pintado, es fundamental fijarse en las etiquetas para encontrar aquel que mejor se ajuste a nuestras necesidades. Y es que obviamente no es lo mismo poner papel pintado en un salón que en una cocina.
No hace falta que decores toda la habitación con papel pintado, sino que puedes colocarlo solamente en una pared para destacarla por encima de las demás. Basta con el elegir los colores y el diseño adecuado para que combine perfectamente con el resto de elementos decorativos.
Una excelente idea para darle a nuestros armarios un toque más moderno y personal. Además, le daremos una sensación más luminosa. Si el armario tiene cristal, quedará todavía mejor pues se verá desde el exterior. Imagina como quedaría la vitrina donde guardas la vajilla o la librería de tu salón con un poco de papel pintado en el fondo o en las baldas.
Si tienes algún armario viejo en casa, puedes darle mayor protagonismo con papel pintado. De esta forma, podrás darle un giro de 180 grados a su aspecto por muy poco dinero. En la actualidad se lleva mucho lo vintage y lo ecléctico, es decir, combinar elementos de diferentes estilos. Si consigues que el aspecto de la estancia sea armónica, podrás disfrutar de un armario realmente original que mezcle lo vintage con lo moderno.
Además de las paredes y los armarios, el papel pintado es una excelente opción para decorar el cabecero. Puedes cubrir un cabecero que ya tengas o hacer algo más minimalista creando la silueta del cabecero con papel pintado. De esta forma, te ahorrarás tener que comprarlo.
Aunque no suele ser lo más frecuente, existen diferentes papeles pintados en el mercado que van muy bien en esta estancia para darle un toque diferente. Los mejores son los papeles pintados de vinilo, ya que son resistentes a la humedad y muy fáciles de limpiar. Si quieres darle un lavado de cara a tu viejo cuarto de baño, ya no tendrás que meterte en engorrosas y carísimas obras de reforma. El papel pintado es una excelente solución para cubrir tus azulejos.
¿Te sumas a la tendencia del papel pintado?
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