En el mundo del diseño de interiores, los salones cuadrados son lienzos en blanco llenos de potencial creativo. Y es que, su simetría natural ofrece una base sólida para experimentar con diferentes disposiciones y elementos decorativos. Sin embargo, debido a su forma equitativa puede parecer un desafío lograr una distribución efectiva en un espacio tan igualado.
Ahora bien, podemos estar seguros de que convertir un salón cuadrado en un espacio acogedor y versátil es totalmente posible. Por ello, en este artículo queremos que te sumerjas en el emocionante viaje de diseñar tu salón cuadrado perfecto, explorando estrategias de diseño que aprovechan al máximo esta estructura.
Desde la selección y disposición del mobiliario hasta la iluminación y elección de colores, en este post descubrirás cómo transformar tu salón cuadrado en un lugar funcional y estilizado que refleje tu personalidad y satisfaga todas tus necesidades.
Si te encuentras frente a la tarea emocionante de pensar en cómo distribuir los distintos elementos en tu salón cuadrado, estás en el lugar adecuado. ¡Prepárate para inspirarte y dar vida a tu salón cuadrado de ensueño!
En un salón cuadrado, la alfombra ayuda a delimitar la zona de estar. Y es que, la zonificación con alfombras divide visualmente el salón en diferentes áreas funcionales. Te recomendamos colocar una alfombra grande debajo del sofá o alguna debajo de la mesa de centro para crear una zona de estar.
Eso sí, ten en cuenta que en estos casos no es frecuente recurrir a alfombras de forma circular de gran tamaño porque harían parecer el espacio más pequeño.
En lugar de colocar el sofá contra una pared, colócalo en el centro del salón. Esto crea un punto focal en esta estancia y permite que el espacio circundante se utilice de manera más eficiente. Además, lo más cómodo es que el sofá principal quede frente al televisor ubicado en un mueble principal. Esto te permitirá disfrutar de cualquier contenido audiovisual siempre que quieras.
En los salones cuadrados un sofá en forma de L también pueden encajar perfectamente en una esquina y aprovechar al máximo el espacio disponible.
Los espejos son los aliados poderosos en espacios pequeños. Si tu salón es cuadrado, pero de pocas dimensiones, coloca espejos en las paredes para reflejar la luz natural y crear una ilusión de amplitud. Un espejo grande detrás del sofá o sobre la chimenea puede hacer maravillas.
Las mesas nido son versátiles y funcionales. Puedes apilarlas cuando no se utilicen y separarlas cuando necesites espacio adicional para servir aperitivos o bebidas a los invitados.
Si tienes un salón cuadrado pequeño y eres de aquellas personas que no quiere prescindir de butacas, busca modelos que tengan brazos estrechos o directamente que no tengan. De este modo, conseguirás aligerar su presencia.
A la hora de ubicarlas en la estancia, lo mejor es colocarlas al lado del sofá si es posible. Ahí puedes colocar una de ellas y la otra en alguna esquine donde no se obstaculice la entrada de luz.
Para dar carácter a tu salón cuadrado, crea una pared de acento. Para ello, puedes pintarla de un color llamativo, aplicar papel tapiz o agregar paneles de madera. Esto añade interés visual y hace que la estancia se sienta única.
Otra opción es emplear un color claro en las paredes para que el salón en su conjunto parezca más grande y luminoso. En él utiliza una variedad de colores y texturas en los accesorios, muebles, alfombras o cojines. De este modo, te asegurarás de crear un espacio acogedor y con estilo que sea a la vez funcional y estético.
Las lámparas colgantes son una buena opción para todo salón cuadrado. Permiten liberar espacio en la mesa y el suelo. Además, permiten iluminar áreas específicas lo que da mucha calidez al ambiente.
Otra alternativa son las lámparas de pie. Tengamos en cuenta que distribuir un salón cuadrado es más complicado que uno rectangular porque suelen quedar huecos entre muebles. Y, una buena forma de rellenarlos es con este elemento decorativo.
Los muebles diseñados específicamente para rincones, como estanterías o escritorios, son ideales para aprovechar esquinas sin usar en un salón cuadrado. Haciendo uso de ellos, puedes crear una pequeña zona de trabajo o lectura en un rincón.
Es muy importante que en cualquier salón cuadrado agrupes los muebles de forma que animen a las personas a interactuar entre sí. Al crear zonas de conversación, conseguirás que tu salón sea más agradable y atractivo.
Opta por cortinas ligeras y translúcidas en lugar de cortinas pesadas. Estas permiten que entre más luz natural y hacen que el espacio se sienta más abierto.
En conclusión, ya sea que estés buscando maximizar el espacio de almacenamiento, crear zonas funcionales o simplemente darle un toque personal a tu salón cuadrado, estas ideas te proporcionan el punto de partida perfecto. ¡Ahora es el momento de dejar volar tu creatividad y diseñar el salón cuadrado de tus sueños!
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