Los cambios de estación pueden ser el momento perfecto para renovar la decoración de la casa. Existen multitud de opciones que ayudarán a que la casa se vea diferente y adaptada a nuevas necesidades o gustos. Si te preguntas cómo cambiar la decoración de mi casa con poco dinero, presta atención a estos consejos y recomendaciones.
Para conseguir que la vivienda se vea diferente no es imprescindible la realización de grandes obras o inversiones desorbitadas, sino que bastará con aplicar el sentido común y prestar atención a los consejos que ha recogido el equipo de expertos de Vía Célere, promotora especializada en el desarrollo, inversión y gestión de activos inmobiliarios y, de los cuales destaca varios en su Guía de Interiorismo.
El primer paso para cambiar la decoración hogareña será renovar la pintura de las paredes. A pesar de que los tonos cambian por temporada, en los últimos años los colores de tendencia son los neutro y claros, puesto que son más fácilmente combinables con el resto de elementos de la casa y, por tanto, más versátiles.
Se puede optar por otro tipo de revestimiento de las paredes como el papel, puesto que aporta un elemento decorativo extra. No solo se emplean en las habitaciones, sino que los papeles vinílicos, que cuentan con revestimiento plástico, son lavables, por lo que funcionan muy bien también en otras zonas como la cocina, además, son más económicos y fáciles de sustituir que los azulejos.
Se trata de una lámina adhesiva que, similar al papel pintado, se coloca sobre el suelo, ofreciendo distintas opciones estéticas. Se emplea mucho en las cocinas, para dar colorido, pero también existen versiones que imitan a la madera para actualizar el suelo del salón.
Elegir nuevas fundas para los cojines hará que, con mínimo presupuesto, el color del salón y los sillones se vea modificado. Además, esta práctica se puede realizar varias veces al año, por ejemplo, por temporadas: con unos colores para invierno y, otros estampados para verano, mezclando texturas y obteniendo diversas combinaciones.
Esta es otra de las claves de estilo de la vivienda, pero no es necesario realizar inversiones muy elevadas para cambiar las lámparas. Basta con cambiar los colores de los apliques o las tulipas, dando un nuevo aire a la decoración.
Decorar las estanterías es otra de las prácticas más sencillas pero que más cambios puede ofrecer. Si se decoran, por ejemplo, colocando los libros en distintas posiciones, incluyendo objetos decorativos como cajas, jarrones o porta velas, se conseguirá que la típica librería se convierta en un mueble más moderno y actual.
Tener plantas en casa aporta luminosidad, pero si además se completa con flores frescas, por ejemplo, en la mesa del comedor, estas ofrecerán una decoración extra. Además, estas se pueden secar y usar para decorar rincones de la casa que estén más apagados.
Pese a que estos elementos son básicos en la decoración, la última tendencia apuesta por combinarlos con espejos, puesto que captan luz y dan profundidad a la pared. Además, si en vez de lienzos, se cuelgan láminas, estas podrán también cambiarse cada cierto tiempo, haciendo que la decoración se vea más actualizada.
Más allá de estos consejos, lo importante siempre es apostar por un estilo propio en base a las necesidades y gustos particulares. Que la vivienda sea cómoda y práctica será la mejor opción para sacarle el máximo partido.
Valladolid es una ciudad con un rico patrimonio histórico y una vibrante vida cultural. De…
Ahorrar para la entrada de un piso puede parecer un desafío abrumador, especialmente con los…
Un despacho es más que un simple lugar de trabajo. Es un espacio donde la…
En los últimos años, los criterios ESG (Environmental, Social and Governance) se han convertido en…
Las facturas de la luz pueden ser un verdadero quebradero de cabeza para muchos. Y…
Decorar una terraza con plantas y flores puede transformar cualquier espacio exterior en un oasis…